Desde que los seres humanos comenzamos a desarrollar el intelecto, gracias al desarrollo evolutivo de nuestro cerebro, se empezó a tener preguntas profundas para el entendimiento de la realidad y de la vida. En este momento ocurren dos cosas paradójicas al mismo tiempo:
1. Desarrollamos la capacidad de observación como base de la ciencia.
2. La creatividad llega a un punto de madurez evolutiva.
Estos dos hechos condujeron a la humanidad al desarrollo de las civilizaciones hasta nuestros días. El primero nos ha permitido observar la realidad de forma transparente para adivinar los códigos ocultos que guarda (matemáticas, física, química, biología) y poder usarlos a través del segundo para mejorar la sociedad desarrollándola a través de diversas disciplinas como la agricultura, la medicina, la arquitectura, la ingeniería e incluso el arte.
¿Pero para qué cuento esto? ¿Qué es exactamente la realidad? Cuento esto porquqe es importante entender primero que nuestra capacidad intelectual y nuestra creatividad son las que nos pueden acercarnos de forma fiel a lo que es la realidad para mejorarla, o nos puede llevar a una interpretación errónea de la misma y a la creación de historías mágico místicas que nos alejen de la verdad. Es más, pienso firmemente que es el gran problema que tiene nuestra raza a día de hoy. Hemos transformado la realidad al haber perdido el control de nuestra creatividad, de tal forma que es muy difícil saber qué, dentro de la realidad, es verdad y es mentira. Por lo tanto, podemos decir que la realidad es todo lo creado en el Universo, seamos conscientes de ello o no, lo observemos o no, sea verdadero o sea falso. La realidad es la máxima expresión de Dios. "Qué más Dios que la realidad y qué más realidad que Dios." (Del Libro Los 4 Altares, Alonso del Río.) Por tanto dentro de la realidad, estamos nostros, como parte fractal de la misma realidad que ejerce de observador y creador. Si es que aún no te has perdido y sigues el hilo del razonamiento podrás entender que una manzana y un manzano son reales y verdaderos, mientras que Darth Vader y Luke Skywalker son reales pero son falsos, forman parte del imaginario y la creatividad humana. Así es que nuestra realidad está compuesta de cosas verdaderas y cosas falsas o especulativas.
Dentro del camino de la consciencia y el desarrollo personal, es tarea fundamental poder discernir que cosas de la realidad son verdaderas y qué cosas son falsas. Para ello, hay que estar dispuesto a observar la realidad sin filtros, sin creencias, sin interpretaciones... es decir, ver la realidad tal y como es. También hay que estar dispuesto a pensar para poder tener conceptos claros y firmes sobre la realidad dada. Por ejemplo, si observas la realidad y piensas, verás que vives en un Universo cuatridimensional: tenemos tres dimensiones del espacio (largo, ancho y profunidad) y una dimensión temporal... Cuando no tenemos estas dos habilidades claras, es cuando podemos crear una realidad paralela que nos aleje de la verdad. Y alejarnos de la verdad, es vivir en la mentira. Y vivir en la mentira es dañino y peligroso para ti y la sociedad.
A lo largo de nuestro desarrollo evolutivo ha habido personas que han usado las mentiras para engañar a las masas y acumular su poder. Ejemplo claro son las religiones, los reinos y las dictaduras. Ese poder es la capacidad inherente que tenemos cada ser humano de observar la realidad tal y como es, de pensar y de finalmente usar esos conocimientos verdaderos para crear belleza, que es el propósito verdadero de la creatividad. Cuando desarrollas estas habilidades, vas descubriendo la realidad y descifrando lo que es verdadero de lo que es falso. Así, eres capaz de identificar tu propia mentira, aquella que te condiciona y te hace creer aquello que no es, para de alguna forma al darte cuenta, te acerques un paso más a la verdad. Del mismo modo, este camino de exploración de la realidad nos libera, puesto que evita que caigamos en creer las mentiras de aquellos que sólo quieren nuestro poder para someternos y controlarnos.
En conclusión, no se trata de sólo pensar por uno mismo qué es la realidad, puesto que estamos totalmente expuestos a creer lo que nos de la real gana... sino observar el Universo y la Naturaleza como la máxima expresión de Dios, para así a través de este ejercicio poder pensar que es verdadero y qué es falso en toda esta historia. La verdad está todo el tiempo frente a nosotros, sin embargo, es la mentira la que no nos deja verla. Si quieres encontrar la verdad, has de descubrir tu mentira. Si quieres ser libre, debes conocer qué te ata, limita, confunde y te aleja de la verdad...
Bendiciones.
Fer
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